Por lo general en nuestra vida estamos muy deseosos, tenemos sueños e ilusiones por cumplir, pero que pasa cuando sentimos que nuestros deseosos no son materializados y que el resto del mundo tiene lo que queremos para nuestras vidas.
Esta respuesta es tan simple como el hecho de respirar y como es simple nos somos capases de ver que está en nuestra manos poder tener todo lo que deseamos solo que olvidamos los principios básico, como por ejemplo: el genio de la lámpara de Aladino, al frotar la lámpara el genio sale y dice tienes la oportunidad de pedir 3 deseos, Aladino estaba tan concentrado en la fortuna que su primer deseo resulto no ser el correcto porque olvido que debía salir de la trampa en que se encontraba, cual es la moraleja de esto, debemos estar muy claro en tres puntos simples, saber pedir (ser, hacer y/o tener), creer que es posible y recibir con alegría.
Cuando
hablamos de pedir debemos iniciar con estar muy claros en lo que queremos, ser específicos,
sentirse merecedor, la única forma de tener algo es pidiendo, podemos citar la
carta del Apóstol Santiago: “No tenéis porque no pedís. Pedís y no recibís,
y esto es porque pedís mal”. Todo está en el cómo lo hacemos y la fe que le
ponemos a nuestra petición, es aquí donde entra el creer.
En
ocasiones el miedo nos impide dar un salto de fe y creer que todos los sueños
pueden hacerse realidad, lo más irónico que este miedo es creado por nosotros
mismos y lo peor es que la mayoría de estos miedos es por cosas que nunca sucederán.
Debemos
recordar que somos seres más fuertes de lo que pensamos, iniciemos con el ciclo
de la vida que acto más difícil sino el de nacer, tendríamos que creer en
nosotros mismos y darnos crédito de vez en cuando, afrontar los retos de una
manera optimista y con una visión positiva y conseguir lo que se desea será más
sencillo, todo cuesta tiempo, dedicación pero soltar es vital, iniciemos con
pedir, luego creemos que lo vamos a obtener y soltamos para que cada paso que
demos nos guíe a la materialización de ese sueño.
Luego
de ese proceso largo de pedir, creer, llega el recibir, este es la parte más
difícil aprender a dar gracias y aceptar todo lo que recibimos a diario no
basta con querer y creer que merecemos debemos abrirnos a ese merecimiento, aunque
estamos hablando de recibir esta enlazado con el dar cuando damos abrimos una
ventana que se convierte en una puerta para obtener eso que tanto anhelamos, no
siempre lo que recibimos es realmente lo pensamos que queremos sino más bien lo
que necesitamos, muchas veces pedimos cosas que olvidamos y en el momento menos
pensado llega a nuestra vida.
Querido
lector, todo en la vida tiene cierto grado de dificultad, no siempre nuestros
sueños se hacen realidad cuando queremos, pero siempre llegan cuando lo necesitamos,
concentrarte en eso que deseas se especificó, cree que lo tendrás y solo espera
que llegue, pero importante en el proceso sigue luchando por lo que te hace
feliz.
“Si
quieres algo enfócate en eso y ajusta tu estilo de vida para que materialice”.
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